Ha llegado el momento. De no estar. Y no se siente cómo un quiero y no puedo. La curiosidad vence a la costumbre y hay algo que da vueltas esperando a saber cómo es pasar estas fechas tan lejos de casa. Tan lejos de los míos. La necesidad de estar bien a pesar de todo convierte a la tristeza en una opción imposible. También trato de mantenerme ocupada. O me mantienen ocupada, que nunca viene mal. Llevo un par de semanas trabajando en el sanatorio a medio tiempo, hoy y mañana a doble turno. Y desde el domingo hasta el 31 a medio tiempo. Incluídas guardias de fin de semana. Y aparte mis pacientes a domicilio. Y aparte mis pacientes de la tesis. Y aparte la tesis. Y aparte la vida social. Cansada, sí. Distraída, también. Ah, y está por confirmarse trabajar en Enero y Febrero jornada completa también. Ocúpate, no preocúpate. La tesis ya tiene pinta de tesis. Falta un montón de cosas, pero ya va queriendo, como dicen aquí. Me quedan 4 pacientes y dos terminan mañana... :) A pesar de todo es...