El dia 29 de cada mes es el dia del ñoqui. (vease una pasta a base de patata y harina)
El viernes era 29 y la amiga de Mariana le conto que en el UNDICCI te regalaban los ñoquis, solo tenias que pagar la bebida.
Asi que despues de un largo dia de compras fuimos a cenar ñoquis. Cabe decir que la promocion es bastante conocida con lo cual el restaurante estaba lleno hasta la bandera. Esperamos un rato a que nos dejaran una mesa libre y nos sentamos a esperar al camarero.
Antes de podernos dar cuenta aparecio la dueña del lugar para pedirnos si podiamos cambiarnos de mesa, que tenia a seis chicos en una mesa de cuatro y nosotras eramos tres en una mesa de seis. Nosotras le dijimos que nos cambiabamos sin problema asi que empezo el desfile de chicos a nuestra mesa y nosotras a la de ellos. Con todo el intercambio de gente uno de los chicos le dio las gracias a Mariana, que ni corta ni perezosa le dijo que como minimo nos tenian que pagar la cena, el, cometiendo un gran error le dijo que si.
Pasamos una velada estupenda, comimos muy bien y nos reimos mucho.
Cuando estabamos por irnos se nos ocurrio una maldad y despues de darle muchas vueltas pensamos dejarlo solo en eso, una ocurrencia. Pagamos la cuenta y cuando nos ibamos Mariana decidio hacerla. Teniamos que pasar por la mesa de los chicos para salir del local, Mariana cogio la cuenta y cuando pasaba por el lado del chico se la dio. La cara del chico cambio, miro la cuenta y volvio a mirar a Mariana. Llegado este momento Mariana le dijo - Mañana vengo por el postre.- Y comenzo a caminar. El estallido de risas de sus amigos al ver su cara de desconcierto no supero nuestras risas a la salida del local. El pobre chico quedo pensando que realmente le iba a tocar pagar, pero es que Mariana es mucha Mariana.
El viernes era 29 y la amiga de Mariana le conto que en el UNDICCI te regalaban los ñoquis, solo tenias que pagar la bebida.
Asi que despues de un largo dia de compras fuimos a cenar ñoquis. Cabe decir que la promocion es bastante conocida con lo cual el restaurante estaba lleno hasta la bandera. Esperamos un rato a que nos dejaran una mesa libre y nos sentamos a esperar al camarero.
Antes de podernos dar cuenta aparecio la dueña del lugar para pedirnos si podiamos cambiarnos de mesa, que tenia a seis chicos en una mesa de cuatro y nosotras eramos tres en una mesa de seis. Nosotras le dijimos que nos cambiabamos sin problema asi que empezo el desfile de chicos a nuestra mesa y nosotras a la de ellos. Con todo el intercambio de gente uno de los chicos le dio las gracias a Mariana, que ni corta ni perezosa le dijo que como minimo nos tenian que pagar la cena, el, cometiendo un gran error le dijo que si.
Pasamos una velada estupenda, comimos muy bien y nos reimos mucho.
Cuando estabamos por irnos se nos ocurrio una maldad y despues de darle muchas vueltas pensamos dejarlo solo en eso, una ocurrencia. Pagamos la cuenta y cuando nos ibamos Mariana decidio hacerla. Teniamos que pasar por la mesa de los chicos para salir del local, Mariana cogio la cuenta y cuando pasaba por el lado del chico se la dio. La cara del chico cambio, miro la cuenta y volvio a mirar a Mariana. Llegado este momento Mariana le dijo - Mañana vengo por el postre.- Y comenzo a caminar. El estallido de risas de sus amigos al ver su cara de desconcierto no supero nuestras risas a la salida del local. El pobre chico quedo pensando que realmente le iba a tocar pagar, pero es que Mariana es mucha Mariana.
Comentarios
a ver si a alguien se le ocurre instaurar por aquí el día del ñoqui!! por diossssss que ricoooooo!
la verdad es que si son ricos los ñoquis.. bien hechos claro, si no se vuelven una pasta pegajosa e incomestible.
besitos